Transformar
adentro y afuera.
Trabajo en el cruce entre lo personal y lo colectivo: investigo cómo construimos sentido, acompaño búsquedas de propósito e impulso proyectos con impacto social.


Soy Ine Insua.
Me mueve acompañar la construcción de sentido y, al mismo tiempo, impulsar iniciativas que fortalezcan la vida colectiva. Creo que el trabajo interior de cada persona se refleja en su forma de participar en sociedad y que, a su vez, las condiciones sociales y materiales inciden directamente en nuestra experiencia individual.
Por eso elijo trabajar en dos planos que se retroalimentan: en lo micro, a través de procesos de mentoría y exploración personal; y en lo macro, liderando proyectos de escala, con foco en generar transformaciones sostenibles.
Mi recorrido combina educación, investigación, coaching y gestión, y soy coautora de Bitácora de una búsqueda. Además de lo profesional, me sostienen pasiones como la naturaleza, los libros, el arte y la gente. También vivencias que me llevaron a la convicción de que siempre podemos convertir lo vivido en aprendizaje y en una plataforma para crear futuro.
Qué hago.
Organizaciones con las que colaboré.












Testimonios.
"Me llevo la conclusión que hay mucho construido en mi vida. Quizás mucho más de lo que me hubiese imaginado cuando arrancó este proceso tan valioso. Me di cuenta en este proceso que cuento con muchas herramientas para encarar la vida: valores, principios, personalidad y determinación. Me ayudó a darme cuenta que mi vida se rige por la búsqueda valiente por la paz y la libertad".
Facundo, 32 años.
"Termino el proceso con claridad, discernimiento, y mucho foco en todo lo que tengo para dar. Fue un espacio de escucha enorme, un espacio que me regalé para mí y del cual salí fortalecida. Me llevo enamoramiento de mi singularidad. Reconocerme a través de la escucha de Ine, de cómo me devolvía lo que recibía de mi propia boca. Fue muy valioso para mí".
Carolina, 28 años.
"Me sirvió mucho poder tener un espacio que me permitiese poner toda mi atención al proceso de explorar mi interior y enfrentarme a preguntas inmensas como quién soy yo o qué quiero para mi vida. Este proceso es igualmente revelador como incómodo, porque es muy difícil encontrar el tiempo y el espacio correcto en el día a día para plantearse temas existenciales tan profundos".
Matías, 43 años.






















































